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Las turbinas para chimeneas son un elemento muy importante, ya que mejoran la eficiencia del artefacto y reducen el consumo de energía. ¿Conoces cómo funcionan realmente? En Fumistería te contamos todo lo que debes saber al respecto.
Estas piezas son consideradas ventiladores que se instalan en algunas de las partes de la chimenea, como en las estufas, campanas o tiros. Su principal finalidad es la de mejorar el rendimiento del artefacto, proporcionando la salida del aire caliente del interior del mismo para su correcta distribución y aprovechamiento. De esta manera realiza la función de subir la temperatura en tu hogar o en una estancia determinada, de una manera más eficiente.
Una de las mejores características de las turbinas es que son más silenciosas que los ventiladores de chimeneas tradicionales. Tienen un diseño más moderno, que se incorpora a la perfección con el artefacto, dependiendo del tipo que elijas. Asimismo, cuentan con mayor capacidad de esparcimiento del calor por toda la habitación, por lo que son ideales para usarse en espacios más grandes.
Hay diversos tipos de turbinas, aunque las categorías más comunes para clasificarlas son las que funcionan con electricidad y las que no. Te contamos algunas de las características de cada tipo:
Las turbinas suelen usarse particularmente en las chimeneas de tipo cassette y en las insert. Estos dos tipos se diferencian por sus materiales de fabricación, el modo en el que distribuyen el calor y la evacuación de humos. Por lo que resulta beneficioso incluir este tipo de piezas a su estructura, para aprovechar mejor su rendimiento general.
Por las diferencias entre ambos tipos es muy común que el uso de la turbina sea para la chimenea de leña insertable. Como su nombre lo indica, están diseñadas precisamente para ser complementadas por algún sistema de ventilación, que permita la mejor distribución de la temperatura correcta.
Este concepto de insert también se utiliza en chimeneas eléctricas o de gas, pero están mas relacionadas con las tradicionales de leña. En cualquier caso, el uso de la turbina reducirá en gran medida el consumo energético y al mismo tiempo el calor se mantendrá en una estancia determinada por un largo periodo.
Las turbinas se pueden usar en la mayoría de los modelos de las chimeneas, tan solo debes consultar previamente sobre su correcta instalación en cada uno de sus tipos. Aunque, la recomendación es usarlas principalmente en las que trabajan con leña, ya que se obtendrán mayores beneficios.
Las altas dosis de calor no son la única ventaja de las turbinas, el esparcimiento uniforme y prolongado del aire caliente también es uno de sus beneficios. A esto se le suma el hecho de que favorecen el ahorro de combustible o de la leña, por no tener que cargar el artefacto de forma innecesaria o muy constante. Por lo que se trata de una excelente inversión a corto y mediano plazo.
En fumistería sabemos lo significativo que es contar con una turbina para chimeneas de calidad y alta duración. Por ello te ofrecemos las mejores opciones, para que puedas complementar tus artefactos con lo que necesites. Asesórate con nosotros y crea los espacios más confortables dentro de tu hogar, sin importar el clima que haya en el exterior.
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