¿Cuándo hay que deshollinar la chimenea?

Deshollinar es una acción de gran relevancia debido a que evita la acumulación de depósitos que pueden ocasionar daños dentro de la chimenea. Estos residuos pueden inflamarse y generar consecuencias graves como propagar el fuego en toda la vivienda.

Por otro lado, cuando los conductos se encuentran sucios u obstruidos, pueden causar que los gases de la combustión no se evacuen adecuadamente, lo que igualmente supone un peligro para la salud.

Deshollinar tu chimenea es además una forma de ahorrar, ya que de esta manera consumen menos combustibles. Por lo que se trata de una de las acciones primordiales relacionadas con su mantenimiento.

El verano es una fecha ideal para que puedas deshollinar la chimenea, te contamos todo a continuación

Si deseas mantener la seguridad al utilizar tus artefactos y ahorrar dinero, es importante que no te olvides de deshollinar la chimenea. De esta manera también evitarás intoxicaciones u otros accidentes que puedan tener consecuencias graves para tu familia.

¿Cómo saber si hay que deshollinar la chimenea?

El mantenimiento de tu chimenea es uno de los aspectos más relevantes, por lo que no debes esperar que se acumule la suciedad o comience a fallar para realizarlo.

En cualquier caso, hay algunas señales que te pueden indicar que tu artefacto necesita que le quites el hollín lo más pronto posible:

• Al abrir la puerta y ves que el humo se revoca, salen llamas o se reaviva el fuego.
• Cuando comienza a calentar menos o necesitas de una mayor cantidad de combustible para lograr la temperatura correcta.
• El cristal de la puerta se empieza a manchar mucho y no consigues limpiarlo adecuadamente.
• Cuando comienzas a sentir un olor a humo, a pesar de no verlo.
• Por los tubos de la chimenea comienza a caer suciedad, es decir, los residuos de creosota (haciendo que la misma no funcione de la manera correcta).

Lo correcto es que no esperes estas señales, sino que lo hagas dos veces al año por lo menos. El verano es la época ideal para hacerlo, debido a que está a punto de llegar la temporada fría del otoño y con ello tendrás listo y en óptimas condiciones tu sistema de climatización.

¿Cómo funciona el polvo deshollinador?

Uno de los mejores aliados para el mantenimiento de tu chimenea o estufa es el polvo deshollinador, pero ¿Cómo funciona?

Tan solo tienes que verter el contenido de una tapa del producto, cuando la instalación se encuentre caliente. Posteriormente, cierras la puerta del calefactor, para que pueda realizar la acción de limpieza.

El mismo se encarga de resecar la resina provocada por la combustión y de esta manera genera la caída de estos residuos. Al hacerlo es mucho más fácil eliminar la suciedad y garantizar la buena limpieza del artefacto.

¿Herramientas para deshollinar?

Además del polvo deshollinador, también existen una serie de herramientas y accesorios para chimeneas que te pueden ser de gran ayuda.

Uno de los más conocidos es el cepillo deshollinador para la limpieza de los conductos, los cuales pueden ser de diferentes durezas y tamaños. La baqueta es un objeto más pequeño, pero que es igualmente relevante debido a su gran utilidad para llegar a rincones más pequeños.

El arpón y la punta pasacodos son accesorios muy útiles para eliminar problemas como los nidos de los pájaros o facilitar el paso de los cepillos. Por lo que no hay excusa para que cuides del estado de tus artefactos, ya que hay muchas formas de hacerlo.

Ahora que ya sabes cómo deshollinar una chimenea, ¡no hay excusa para dejarlo para último momento! Recuerda que es la mejor manera de garantizar su buen funcionamiento y de mantener seguros a tus seres queridos en un ambiente confortable.